2007-08-08

Fluxx


El otro día, y tras un período de tiempo bastante prolongado sin hacerlo, montamos timba en casa de la Meri.

Como viene siendo habitual en estos casos, nos mostró varias novedades. Lo que se salía esta vez de lo habitual era un juego que sorprendía porque:


  1. no era monstruosamente voluminoso.

  2. no era difícil aprender a jugarlo.

  3. no era terriblemente engorroso de jugar.

  4. jugarlo no se hacía más lento que un día sin World of Warcraft.

  5. no era tedioso, sino retorcidamente divertido.

  6. tenía muuuuuuuuuuy maaaaaaaaaala leche.



Su nombre: Fluxx



En este juego, partimos de la base de que las reglas cambian. Combinando un juego de estas características con nuestro particular sentido del humor y nuestra "mala folla", os puedo asegurar que no me (nos) había(mos) reído tanto en mucho tiempo.

Si tenéis que hacer un viaje en grupo, visitar a amigos, montar una reunión social, o lo que sea, os recomiendo que os lo llevéis (cabe en el bolsillo). Triunfaréis seguro.

Besitos.

2007-08-03

Monográfico: Jean-Claude Van Damme

Pues sí, queridas mías. Hoy me ha dado por poner un par de vídeos curiosos del celebérrimo actor de películas de acción.

En el primer vídeo, el famoso actor todavía no era famoso, por lo que, supongo, se veía obligado a ser más actor. Y vaya papelón.






Pero todos sabemos que alcanzó la fama, con todo lo que conlleva: dinero, la adoración del público... y sexo. A veces, incluso demasiado. Al segundo vídeo me remito.





Nota: ambos vídeos los he encontrado, en un momento u otro, visitando el blog de mi querido Queer Enquirer, algo que es siempre muy recomendable.

Besitos, Queer. Y a vosotras, también.

2007-08-02

Update

Cuenco de cereales “Pantera Rosa” - “Pink Panther” cereal bowl Me he comido los cereales. Y sí, en el cuenco de la foto, que me lo regaló la Niña en nuestra reciente escapada con el Niño a Port Aventura (sí, sin lo de "Universal Studios'" por delante, que al parecer se lo han quitado).

2007-08-01

Las últimas horas...

Pues aquí estoy, de nuevo, para contaros mis penas. Para variar.

Ayer, por la tarde, tenía cita con el dentista. La primera en la que realmente me podría hacer algo desde el accidente (ver Yo No Soy Esa), y para complicarlo todo, de camino hacia allí tuve una discusión con el Niño por razones que no vienen a cuento ahora mismo, por lo que llegué bastante nervioso.

De hecho, al llegar a la puerta de la consulta, llamé al timbre y me encontré con que allí había algo parecido a un taller de confección, por lo que pude ver de manera extraordinariamente fugaz. Una señora muy amable, a la que recuerdo con rulos en la cabeza, aunque eso lo achaco a los nervios, me indicó que la consulta de mi dentista se encontraba, desde hace años, en el piso de arriba. Me había liado de piso.

Reando mis pasos, subo otro piso, y por fín entro, ortopantomografía en mano, y me pasan directamente a la silla eléctrica del dentista, donde pasé una hora en absoluta tensión, sudando como una cerda y sin saber muy bien por qué, ya que este hombre tiene muy buena mano y no me ha hecho daño nunca, que yo recuerde.

Un nervio muerto más tarde, pago mis 90€, me apunto en el móvil la próxima cita (me tienen que empastar la muela que me han insensibilizado), y me despido hasta la próxima. Cuando me dispongo a bajar las escaleras (por algún motivo me gustan más que el ascensor, en ese edificio), me doy cuenta de que ya había llegado a ellas una fracción de segundo antes; lo que sucede a continuación es digno de cualquier episodio de Looney Tunes: me doy cuenta de que tengo ya un pie en el aire, y estoy apoyado sobre él, intento recuperar el equilibrio, desplazando mi peso hacia el otro pie, pero éste resbala, mis brazos intentan alcanzar la barandilla, pero no lo consiguen, y finalmente acabo bajando tres o cuatro escalones de más, no con el culo, sino con la región lumbar y el antebrazo derecho.

En definitiva, que llegué a casita "caliente".

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A eso de las doce de la noche, y justo cuando me disponía a meterme un peasso tazón de cereales que me apetecía un huevo, me suena la alarma del móvil: Vampiro a las 7:30. En ayunas. Pos nada, que el tazón, con sus cereales y su leche, fueron a parar a la nevera, porque si no ya no llegaba en ayunas al hospital ni borracho.

Esta mañanita, me han sacado más sangre que nunca (¿quién me manda a mí pedirle a la doctora un completo?. Si es que a veces tengo una bocaza...

Saludínx.